Alerta Bolivia
Tarija, 04 de junio de 2025 – El director de la Federación de Ganaderos de Tarija (FEGATAR), Richard Flores, expresó su profunda preocupación ante la creciente dificultad para transportar ganado hacia los centros de abasto, debido a la escasez de diésel que afecta a la región. Según explicó, los camiones que movilizan animales deben esperar varios días para cargar combustible, lo que está generando un perjuicio directo en el abastecimiento de carne y podría derivar en un alza de precios en los próximos días.
“Estamos enfrentando serios problemas para trasladar nuestros animales hasta el principal centro de abasto que es la ciudad de Tarija. Nuestros camiones hacen largas filas para cargar una mínima cantidad de diésel, tanto para ir como para volver”, advirtió Flores.
Esta situación ya estaría afectando la provisión regular de carne.

“Cuando hay escasez de ganado en los mercados, los precios tienden a subir y se genera especulación. Eso es lo que está comenzando a ocurrir”, señaló.
Bloqueos y contrabando agravan el problema
El dirigente también mencionó que el bloqueo que se instaló desde el lunes en Bermejo ha agudizado el problema, ya que esa vía es crucial para el tránsito de camiones que abastecen de ganado a Tarija. A pesar de estos obstáculos, aseguró que por el momento los precios se mantienen estables entre 28 y 30 bolivianos por kilo gancho, dependiendo de la calidad del animal.
A los problemas de transporte y bloqueo se suma otro fenómeno que preocupa al sector: el contrabando a la inversa.
“Mucha gente de Argentina está viniendo a comprar carne en Bermejo y Yacuiba. Esto reduce la disponibilidad del producto en los mercados locales y presiona los precios al alza, especialmente en municipios fronterizos”, afirmó Flores, quien pidió mayor control por parte de las autoridades en las zonas limítrofes.
Alza de insumos afecta la producción ganadera
Flores también alertó que el aumento sostenido en el precio de insumos ha encarecido la producción de carne.
“Hoy un quintal de maíz cuesta entre 150 y 160 bolivianos, cuando antes se conseguía por 90 o 100. Lo mismo ocurre con la soya, el afrecho, los antiparasitarios y las vitaminas. Todo ha subido y eso nos obliga a revisar nuestra hoja de costos”, explicó.
A pesar de estos desafíos, el dirigente destacó que, gracias a las lluvias regulares registradas en la anterior gestión, se logró una buena producción de ganado que garantiza el consumo departamental por ahora. Sin embargo, advirtió que la situación económica nacional —marcada por la devaluación del boliviano y la escasez de dólares— podría afectar la sostenibilidad del sector ganadero si no se adoptan medidas urgentes.
“Necesitamos respuestas inmediatas de las autoridades para garantizar el abastecimiento de combustibles, frenar el contrabando y estabilizar los insumos. De lo contrario, el desabastecimiento de carne será una realidad en los mercados de Tarija”, finalizó.