La Cámara Nacional de Industrias (CNI) expresó este miércoles su “desacuerdo total” con la determinación del Gobierno de declarar feriado el próximo 7 de agosto y solicitó “encarecidamente” revisar la medida con el fin de evitar la paralización del aparato productivo, con “efectos negativos sobre la producción de las empresas, la provisión de bienes y servicios a la mesa de los bolivianos y la reactivación económica”.
«La CNI reconoce y valora el significado histórico del 6 de agosto, día de conmemoración de la Independencia de nuestra amada Bolivia, pero considera inoportuna e injustificada la interrupción adicional de actividades productivas el jueves 7, ya que el mejor homenaje a la Patria es el trabajo», indicó el ente colegiado en un comunicado.
La CNI considera que la medida asumida por el Gobierno tendrá los siguientes efectos:

- Pérdida de producción: La suspensión de actividades laborales durante dos días resultaría en una pérdida de producción y, por lo tanto, en una disminución del PIB. Un día adicional de «paro» de actividades representa aproximadamente, una afectación económica nacional al sector industrial superior a los 12 millones de dólares.
- Pérdida de productividad: La ausencia de trabajadores durante dos días afectaría la productividad de las empresas y retrasaría proyectos y entregas.
- Costos adicionales: Las empresas deben incurrir en costos adicionales para cubrir los salarios de los trabajadores durante los dos días de feriado.
- La medida, al no constituir un verdadero fin de semana largo, genera una pausa innecesaria en medio de la semana laboral, ya que las actividades deben reanudarse el viernes 8 de agosto.
“Bolivia no está para detenerse, está para levantarse. Nuestro país necesita más producción, más inversión, más empleo formal y no más interrupciones que afectan la frágil dinámica económica. Cada día cuenta, especialmente para los sectores que empujan el crecimiento con trabajo honesto y responsable”, dice el pronunciamiento.
Con información de Visión 360
