El comunicador Luis Muñoz interpuso una demanda de «resarcimiento de daños y perjuicios» por casi medio millón de dólares contra Brenda La Fuente, exdirectora ejecutiva de la Autoridad Jurisdiccional Administrativa Minera (AJAM), tras ser absuelto de un proceso judicial que lo mantuvo privado de libertad y que calificó como «infundado».
El caso se remonta a principios de 2022, cuando Muñoz trabajó durante dos meses en la AJAM y que justamente fue contratado para el manejo de las RRSS de la institución. A dos días de finalizar su contrato, La Fuente lo acusó penalmente por la presunta elaboración de un meme que insinuaba que ella obtuvo el cargo mediante una relación sentimental con un hijo del presidente Luis Arce.
«Haciendo abuso de poder, consiguió que me aprehendieran y, en tiempo récord, un juez dictara prisión preventiva», relató Muñoz, quien permaneció diez días en celdas policiales antes de lograr que su medida cautelar se modifique a arresto domiciliario.


Tras un proceso judicial de dos años, la Policía Forense demostró mediante el peritaje a su teléfono celular que no existían evidencias de que hubiera realizado la publicación imputada. «La prueba esencial fue el desdoblamiento del celular, tras lo que la Policía ha mencionado que no había nada», destacó.
El caso fue sobreseído definitivamente en 2024, pero Muñoz asegura que el daño a su imagen y vida personal fue irreversible: «En la televisión aparecí como un delincuente; mis hijos me vieron tras las rejas».
La demanda adquiere relevancia pública dado que Brenda La Fuente se encuentra actualmente en el centro de la atención mediática tras denunciar al presidente Luis Arce por negarse a reconocer la paternidad de un hijo que habrían tenido en 2023.
En su momento, la Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia (ANPB) calificó el proceso contra Muñoz como un «atentado contra la libertad de expresión» impulsado «maliciosamente».
