El gobernador en ejercicio de Santa Cruz, Mario Aguilera, se dirigió al presidente Luis Arce y le exigió que él y su gabinete se trasladen a la capital cruceña para hablar sobre la crisis hidrocarburífera que desató el desabastecimiento de combustibles y el encarecimiento de productos de la canasta. familiar.
La autoridad criticó la “mala política hidrocarburífera” que se aplicó en el país desde hace muchos años atrás y que ahora desencadenó en la molestia y preocupación de transportistas, comerciantes y familias bolivianas.

En conferencia de prensa, Aguilera argumentó que la actual crisis económica daña profundamente al movimiento del departamento y que “si no hay combustible, Santa Cruz no puede producir y si deja de hacerlo más del 70% de los alimentos de los bolivianos está en peligro” , apuntó.
“Exigimos la presencia del Presidente y su gabinete técnico aquí en Santa Cruz, donde se produce de manera responsable”, precisó.
Además, criticó la afectación de la política de hidrocarburos a las administraciones departamentales, argumentando que las Gobernaciones estaban “al borde del colapso económico”, dada la alta dependencia de recursos provenientes por concepto de regalías, IDH y el impuesto especial a los hidrocarburos y sus derivados.
Liberar importaciones
Aguilera precisó que “es momento de tomar decisiones” y permitir a la población abastecerse de gasolina y diésel para paliar los efectos de la crisis. Por tal motivo, la Gobernación de Santa Cruz propuso como medida principal ya corto plazo, la liberación de importación de combustibles con incentivos impositivos a los importadores y arancel cero.
“Debemos poner el foco en medidas estructurales que eviten nuevamente esta crisis, para eso debemos atraer inversión extranjera directa para aumentar la producción de hidrocarburos”, expuso el Gobernador.
Para lograr el cometido, la Gobernación de Santa Cruz, también propuso la elaboración de un nuevo pacto fiscal con la modificación de ingresos, de acuerdo a las autonomías, para fomentar el crecimiento regional.
Para esto, la institución cree necesaria la visita del Ejecutivo para establecer la comunicación con el sector industrial y productivo y aplicar las medidas necesarias.