Alerta Bolivia
Tarija, 14 de noviembre de 2024 – En un acto de protesta extrema, seis trabajadores de salud de Tarija se crucificaron en el frontis de la Gobernación, exigiendo respuestas inmediatas ante la falta de atención a sus demandas y el rechazo del gobernador Óscar Montes a sus peticiones. Entre los manifestantes, se cuentan tres mujeres y tres varones, quienes tomaron esta drástica medida tras sentirse insultados y menospreciados por las autoridades departamentales. Los trabajadores han venido exigiendo la desvinculación del director del SEDES y todo su entorno, al considerar que su gestión ha sido perjudicial para el sector salud. Esta protesta se lleva a cabo en el marco de un paro de 96 horas, durante el cual se suspenden los servicios médicos, afectando a la población tarijeña.
La Asamblea Legislativa Departamental de Tarija ha hecho un llamado urgente al diálogo, buscando una solución a la situación que afecta a la población. El paro de 96 horas, convocado por el sector salud, ha provocado la suspensión de servicios médicos, generando preocupación en la ciudadanía. Sin embargo, ante la falta de voluntad para negociar por parte del Ejecutivo, los trabajadores advierten con intensificar sus medidas de presión.
Durante la protesta, uno de los voceros del Comité de Huelga expresó su indignación ante lo que considera una actitud despectiva por parte del gobernador Montes. «Nos insultan, nos minimizan, pero esta crucifixión es un símbolo de dignidad, de nuestra lucha por respeto y por la atención a nuestras demandas», afirmó. Los manifestantes consideran que las autoridades departamentales han mostrado insensibilidad y falta de respeto hacia la clase trabajadora, lo que los ha llevado a tomar decisiones drásticas.
La situación se ha intensificado con la colocación de carteles en la fachada de la Gobernación, algunos de los cuales están manchados con la sangre de los manifestantes. Los trabajadores se extrajeron sangre para marcar sus pancartas, en un acto simbólico que busca visibilizar la gravedad de sus reclamos y la desesperación que sienten ante la falta de respuestas concretas.
El paro, que ya cumple con su tercera jornada, sigue en pie y se mantiene la presión por parte del sector salud, que no descarta la posibilidad de ampliar las medidas si no se obtiene una solución inmediata. Mientras tanto, la población sigue a la espera de una respuesta que ponga fin a esta crisis que afecta a los servicios médicos en Tarija.