Alerta Bolivia
Tarija, 01 de agosto de 2024

En una reciente declaración, el alcalde de Tarija, Jhony Torres, abordó la grave crisis económica que enfrenta la región y el país. Torres destacó que la situación actual no se trata de una mera circunstancia pasajera. A pesar de la llegada de buques con combustible, el problema podría persistir si no se toman medidas estructurales. Además, advirtió sobre el impacto de la inflación, que ha reducido drásticamente el poder adquisitivo de los ciudadanos. Según el alcalde, la depreciación del boliviano frente al dólar y el déficit fiscal son preocupaciones fundamentales que agravan la situación.
Torres enfatizó que el déficit en la balanza fiscal, que actualmente ronda el 10-11%, es alarmante y recordó que en 1982, un desbalance similar llevó a una inflación descontrolada. El alcalde criticó el modelo económico actual, sugiriendo que el gobierno debería adoptar un enfoque más equilibrado, similar al que propuso la ley 21060, que aboga por no gastar más de lo que se gana. Además, sugirió que el dólar debería ser variable en lugar de fijo, para ajustarse a las condiciones económicas fluctuantes y para evitar el sangrado económico causado por las subvenciones a los hidrocarburos.
En cuanto a las soluciones, Torres hizo un llamado a la administración actual para que implemente medidas correctivas antes de que la situación empeore. Comparó la situación económica con un camión en descenso sin frenos, instando al gobierno a «jalar el freno de mano» y a buscar alternativas efectivas para evitar una crisis más profunda. También mencionó la necesidad de reformas estructurales y la importancia de no depender exclusivamente de soluciones de corto plazo, como los créditos internacionales.