Un violento enfrentamiento ocurrió este miércoles en la frontera entre Bolivia y Argentina, específicamente en la zona de Aguas Blancas, provincia de Salta. En el incidente, un grupo de «mochileros» narco—dedicados al transporte de cocaína desde Bolivia hacia Argentina—se enfrentó a tiros con personal de la Gendarmería Nacional Argentina. Como resultado del tiroteo, un presunto narcotraficante murió y tres fueron arrestados, incluyendo dos ciudadanos bolivianos.

El conflicto tuvo lugar en una zona boscosa conocida como “Finca Medina”, ubicada en la confluencia de los ríos Tarija y Bermejo, frontera natural entre ambos países. Efectivos de la Unidad de Inteligencia Criminal de Salta y el Escuadrón 20 «Orán» patrullaban la zona cuando avistaron a un grupo de entre 15 y 20 individuos cargando mochilas, aparentemente con drogas. Al percatarse de la presencia de los gendarmes, los mochileros comenzaron a disparar para luego huir, abandonando parte de su carga en el proceso.
Momentos después, algunos de los delincuentes regresaron al lugar para intentar recuperar los paquetes de droga, lo que desencadenó un nuevo intercambio de disparos con las fuerzas de seguridad. Tras un operativo de búsqueda y aseguramiento de la zona, la Gendarmería logró capturar a tres personas, dos de ellas de nacionalidad boliviana. En las mochilas decomisadas, se hallaron más de 120 kilos de cocaína, además de cinco armas de fuego de distintos calibres.

El tiroteo y la captura de los narcos no es un hecho aislado en esta región fronteriza. Las rutas ilegales entre Bolivia y Argentina son frecuentemente utilizadas para el tráfico de estupefacientes, y este tipo de enfrentamientos pone de relieve la compleja situación de seguridad en la frontera. Los detenidos fueron puestos a disposición de la Fiscalía de Orán, que ya ha iniciado las investigaciones correspondientes.
Este hecho resalta nuevamente la peligrosidad del tráfico transfronterizo en la zona, donde grupos de mochileros, conformados por individuos de ambas nacionalidades, arriesgan su vida transportando droga en áreas de difícil acceso, en un intento por sortear a las fuerzas de seguridad de ambos países. Las autoridades bolivianas y argentinas están coordinando esfuerzos para frenar esta actividad ilícita, pero los enfrentamientos como el ocurrido en Aguas Blancas muestran la persistencia y la violencia del narcotráfico en esta región.