Alerta Bolivia
Jueves, 30 de enero de 2025 – En un nuevo operativo antidrogas realizado por la Gendarmería Nacional de Argentina, cuatro ciudadanos bolivianos fueron detenidos en la provincia de Tucumán, acusados de transportar cocaína hacia la Ciudad de Buenos Aires. El hecho ocurrió durante un control de rutina en la Ruta Nacional Nº 9, donde los efectivos descubrieron que los detenidos llevaban consigo cápsulas de cocaína que habían ingerido, con un estimado de más de 4 kilos de droga.

Los bolivianos, identificados como presuntas «mulas» del narcotráfico, viajaban en un ómnibus de larga distancia que había partido desde La Quiaca, localidad fronteriza con Bolivia, con destino a Buenos Aires. Según informaron las autoridades argentinas, los detenidos no portaban equipaje y mostraron un estado de nerviosismo que llamó la atención de los gendarmes, lo que llevó a una revisión más exhaustiva y al hallazgo de la droga.
Este caso se suma a una serie de operativos recientes en la frontera norte de Argentina, donde las fuerzas de seguridad han intensificado los controles para combatir el narcotráfico. Sin embargo, también pone en evidencia el preocupante rol que ciudadanos bolivianos están desempeñando en estas redes delictivas, ya sea por coerción, necesidad económica o desconocimiento de las graves consecuencias de sus actos.
Un problema que trasciende fronteras
La detención de estos cuatro bolivianos no es un hecho aislado. En los últimos años, se han registrado múltiples casos similares en los que ciudadanos del país son utilizados como «mulas» para transportar drogas hacia destinos internacionales. Este fenómeno refleja la complejidad del narcotráfico en la región, donde las redes criminales aprovechan las vulnerabilidades sociales y económicas de las personas para reclutarlas en sus actividades ilícitas.
Desde Bolivia, las autoridades han reiterado su compromiso en la lucha contra el narcotráfico, trabajando en coordinación con países vecinos para desarticular estas redes. Sin embargo, este caso demuestra que aún queda un largo camino por recorrer, no solo en materia de seguridad, sino también en la implementación de políticas públicas que aborden las causas estructurales que llevan a ciudadanos a involucrarse en este tipo de delitos.
Consecuencias legales y humanas
Los cuatro bolivianos detenidos fueron puestos a disposición de la Justicia Federal argentina, que investiga el origen de la droga y su destino final. De ser declarados culpables, podrían enfrentar penas severas, incluyendo largas condenas de prisión en Argentina.
Más allá de las implicaciones legales, este caso también plantea un desafío humanitario. Muchas de las personas involucradas en el transporte de drogas son víctimas de engaños o se ven obligadas a participar en estas actividades debido a su situación económica. Por ello, es fundamental que tanto Bolivia como los países de la región refuercen sus esfuerzos para prevenir el reclutamiento de «mulas» y ofrecer alternativas reales a quienes podrían ser captados por el narcotráfico.
Con información de el Tribuno