Alerta Bolivia
Tarija, 05 de febrero de 2025 – La reciente cancelación del proyecto «Colosal Andalucía» en Tarija ha desatado un intenso debate sobre el desarrollo urbano, la inversión privada y la oposición a proyectos de gran envergadura. Este ambicioso plan, impulsado por la empresa AECOMIT en alianza con el Gobierno Municipal de Tarija, prometía transformar 1,8 hectáreas de terreno en un moderno centro comercial y turístico con una inversión estimada en 22 millones de dólares. Sin embargo, diversas críticas y cuestionamientos llevaron a la alcaldía a dar marcha atrás, desestimando la concesión del terreno.

Lo sucedido deja en evidencia un problema recurrente en Tarija y otras regiones del país: ¿realmente existe una oposición sistemática al progreso, o los proyectos simplemente no se gestionan de manera adecuada?
Falta de socialización y transparencia
Uno de los mayores cuestionamientos al proyecto fue la falta de información y consulta con la ciudadanía. Vecinos del Distrito 6 expresaron su rechazo, alegando que nunca fueron informados ni consultados sobre los impactos que tendría la construcción. Además, sectores como el Colegio de Arquitectos señalaron posibles irregularidades en la concesión del terreno y advirtieron sobre la necesidad de realizar estudios de impacto ambiental.
A esto se sumó la denuncia de la concejal Raquel Ramos, quien afirmó que el contrato no garantizaba claramente los beneficios para la población y que podría implicar la cesión indebida de terrenos municipales. También se mencionó la posible tala de árboles en la zona, un tema sensible en un contexto donde el medioambiente es una prioridad creciente.
¿Resistencia al cambio o mala planificación?
Si bien el escepticismo hacia grandes proyectos puede entenderse cuando no hay transparencia, también es cierto que Tarija enfrenta una constante resistencia a la inversión privada y el crecimiento urbano. Cada vez que se plantea una iniciativa de desarrollo, surgen voces en contra, muchas veces sin argumentos técnicos sólidos.
El progreso no puede detenerse, pero tampoco debe imponerse de manera unilateral. La clave está en equilibrar el desarrollo económico con la participación ciudadana y el respeto por el entorno. Un proyecto bien estructurado, con estudios previos, consultas abiertas y garantías de beneficio real para la población, puede ser la diferencia entre el éxito y el rechazo.
Lecciones para el futuro
La cancelación de «Colosal Andalucía» es un llamado de atención para las autoridades y empresarios. No basta con presentar un proyecto atractivo; es fundamental involucrar a la comunidad desde el principio, disipar dudas y garantizar que los beneficios sean compartidos.
Tarija necesita inversión, empleo y desarrollo, pero también requiere proyectos sólidos, bien planificados y con una gestión transparente. Si queremos dejar de ser una ciudad atrapada en debates estériles y avanzar hacia el futuro, es momento de aprender de estos errores y trabajar en soluciones que realmente sumen al progreso.