Donald Trump se ha convertido hoy oficialmente en el 47º presidente de Estados Unidos en una ceremonia celebrada en el Capitolio de Washington. A pesar de los intensos fríos, que obligaron a trasladar el evento al interior, el presidente electo ha jurado su cargo ante un nutrido público y en un contexto político marcado por su sólido apoyo republicano.
«La edad de oro de Estados Unidos comienza ahora mismo. A partir de hoy, nuestro país florecerá y será respetado en todo el mundo», dijo Trump en su discurso de investidura. «No permitiremos que se aprovechen más de nosotros», añadió.
El nuevo líder estadounidense también ha anunciado que declarará inmediatamente la emergencia nacional en la frontera sur con México. «Se detendrán inmediatamente todas las entradas ilegales y comenzaremos las deportaciones», dijo el presidente.
La jornada comenzó con Trump asistiendo a un servicio en la histórica Iglesia Episcopal de St. John antes de tomar posesión. Con el Congreso bajo control republicano, se esperan grandes cambios en las instituciones del país bajo su segundo mandato.Donald Trump, ex promotor inmobiliario de 78 años, famoso por su imprevisibilidad, regresó el lunes al poder tras negarse a reconocer su derrota ante Joe Biden en las elecciones de 2020, lo que llevó al asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021.
Un día que pasará a la historia
También vuelve a la Casa Blanca como superviviente de un intento de asesinato, presunto incitador de un golpe de Estado fallido y como delincuente convicto, algo que nunca ha pasado en Estados Unidos.
Las semanas transcurridas entre su resonante victoria electoral sobre la demócrata Kamala Harris, han estado plagadas de especulaciones sobre lo que hará durante su segundo mandato, sobre todo después de sus amenazas a varios países europeos, Canadá, México y China, entre otros.
Trump actuará con rapidez después de la ceremonia, con órdenes ejecutivas ya preparadas para su firma para restringir los cruces fronterizos, aumentar el desarrollo de combustibles fósiles y poner fin a los programas de diversidad e inclusión en todo el Gobierno federal. Las órdenes ejecutivas son el primer paso en lo que Trump llamará «la restauración completa de Estados Unidos y la revolución del sentido común».