El pie de atleta (tinea pedis) no es exclusivo de los atletas; es una infección común. La erupción con picazón suele aparecer entre los dedos y la planta de los pies. También puede afectar las uñas de los pies.
El pie de atleta se puede contagiar de persona a persona. Por ello, es recomendable usar chanclas en los vestuarios si acudes a una piscina. También puede propagarse de los pies a otras partes del cuerpo.
Los hongos prefieren ambientes cálidos y húmedos y pueden vivir en la piel, las uñas y el cabello. La infección se propaga por contacto directo con la piel o con objetos contaminados. Esa es la razón de que pueda migrar fácilmente de una parte del pie a otra o de un pie a otro.
Además, puede propagarse a otras partes del cuerpo. Es probable que esto ocurra después de tocarse los pies. Una vez que las manos se contagian de hongos, cualquier parte del cuerpo que toques es vulnerable a la infección. Asimismo, podría propagarse si te limpias los pies y usas la misma toalla para el resto del cuerpo antes de lavarlo.
La infección recibe diferentes nombres según la parte del cuerpo afectada. Este tipo de infección fúngica en la piel del torso, las piernas o los brazos se conoce como tiña. Y cuando se presenta alrededor de la ingle o la cara interna de los muslos, se denomina tiña inguinal.
Si deseas saber más sobre cómo el pie de atleta puede transmitirse a otras partes del cuerpo, consulta a tu médico.
